Pregunta: Tengo una perrita salchicha de once años con una enfermedad de movilidad degenerativa. Casi no puede mover las patas traseras. Me pregunto si hay algún modo de ayudar a un perro con movilidad reducida a mejorar su calidad de vida. Por otro lado, hace como dos meses que su orina tiene un olor muy fuerte. ¿Puedo darle algo para suavizarla?
Respuesta: Ayudar a un perro con movilidad reducida a mejorar su calidad de vida es posible y necesario. Pídele a tu veterinario que le prescriba, además de medicamentos para manejar el dolor, suplementos de glucosamina y condroitina. Ambos son buenos aliados para perros con problemas articulares y con movilidad degenerativa.
Si bien no pueden revertir los daños en las articulaciones, se ha observado que sí logran ralentizar el deterioro articular. También mejoran la movilidad y la calidad de vida de los perros con deterioro articular, puesto que estimulan la secreción de líquido sinovial (el fluido que lubrica las articulaciones) y tienen propiedades antiinflamatorias y analgésicas.
Las dosis debe prescribirlas el profesional, ya que dependerá de lo avanzado de la enfermedad y de las condiciones específicas del animal. Ambos suplementos se consideran muy seguros, pero algunos perros podrían experimentar leves diarreas temporales que desaparecen ajustando las dosis. En casos muy raros se ha observado un aumento de los niveles de glucosa en perros diabéticos.
MEJORAR LA CALIDAD DE VIDA DE UN PERRO con MOVILIDAD reducida ES POSIBLE Y NECESIARIO
El control de peso también contribuye a mejorar la calidad de vida de un perro sin movilidad, ya que así se alivia la presión sobre las articulaciones. La fisioterapia y el buen descanso son también importantes. Una cama ortopédica de calidad puede contribuir mucho a su comodidad.
Respecto al fuerte olor de su orina, la primera recomendación es que aumentes su ingesta de líquido y vigiles la aparición de otros síntomas como fiebre, dolor al orinar, cambios de color en el pis, restos de sangre… Los olores fuertes, desagradables o inusuales pueden esconder una infección de orina, y los perros con movilidad reducida tienen dificultades para mantenerse limpios, lo que aumenta el riesgo de infección.
La alimentación también influye en el olor de las micciones. Si has cambiado su dieta recientemente, ahí podría estar la causa. No podemos descartar una enfermedad subyacente por su avanzada edad, como problemas renales o diabetes. Si mejoras su hidratación y no hay alivio en pocos días, habrá que efectuar un análisis de orina para identificar el origen y prescribir el tratamiento más adecuado.
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