Pregunta: Tengo un perro de dos años que sacude la cabeza con frecuencia y se restriega las orejas contra el suelo. Creo que a mi perro le duelen los oídos. A veces se pone muy nervioso y chilla. Una vez calmado, se queda bien, aunque estos episodios pueden repetirse hasta dos veces al día. El veterinario me recomendó mantener sus oídos siempre limpios y despejados de pelo. Así lo hago. Lavo sus oídos con una gasa empapada en suero fisiológico y recorto los pelillos interiores.
Respuesta: Es cierto que la mejor forma de prevenir la otitis canina es mantener limpios y despejados de pelo sus pabellones auditivos. Sin embargo, si ya hay infección, esta medida resulta insuficiente. Lo más seguro es que el dolor de oídos de tu perro se deba a una otitis externa, que es la inflamación del conducto que une el tímpano con el exterior. El tratamiento se basa en antibióticos y/o corticoides. Será tu veterinario quien prescriba duración y cantidades. Existen productos capaces de hacer frente a la otitis externa aguda sea cual sea su origen.
La otitis en perros puede desencadenarse por varios factores: alergia, dermatitis, humedad, parásitos, bacterias, levaduras… Los signos que señalas son inequívocos de que a tu perro le duelen los oídos, y urge ponerle remedio cuanto antes. Susana Cacho, veterinaria asesora de Thepets.es, advierte que el exceso de cerumen y cúmulo de pelo en el pabellón auditivo “son factores que predisponen. Lo mismo que la humedad, las orejas caídas que impiden la buena ventilación auricular y el uso indiscriminado de sustancias higiénicas. Hay que limpiar sus oídos, pero con moderación y productos adecuados”.
EL DOLOR DE OÍDOS EN EL PERRO ES MUY MOLESTO Y PUEDE PROVOCAR CAMBIOS DE COMPORTAMIENTO
¿Cómo hay que limpiarlos? Con una gasa esterilizada ligeramente humedecida en una solución neutra. Nada más. Olvida bastoncillos, algodones, sueros, manzanilla u otros remedios dañinos. Hay que retirar solo los residuos visibles, sin mayor ambición. Y dejar el pabellón auditivo bien seco. Respecto a la frecuencia, una vez a la semana es más que suficiente. Eso sí, tras una jornada en el campo, se deben revisar a fondo los oídos para eliminar restos de paja, yerba, arenilla…
Aprende algo más…
Un perro tiene otitis cuando su oído está inflamado. La otitis puede ser externa, pero también media o interna. La más frecuente, y también la menos grave, es la externa. Antes de aplicar el tratamiento, hay que limpiar los oídos. Si hay mucho dolor, el veterinario prescribirá analgésicos con efecto antiinflamatorio. Las otitis del oído medio exigen un cultivo bacteriano de la secreción auricular para determinar el tratamiento. Una infección externa mal curada puede derivar en una otitis media de gravedad.
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